Se acerca el verano, los días se alargan, las noches suavizan sus temperaturas, y nosotros tras la dura rutina diaria, nos merecemos un descanso. Y que mejor que llegar a casa y tirarte en una hamaca y sentirte como Huckleberry Finn, viendo pasar las nubes. Y no me pongas excusas, que si no tengo espacio, que no sé dónde anclarla, que se me va a ensuciar, nada de eso.
Tienes hamacas de cuerdas o con barras, estas hamacas pueden ir entre árbol y árbol, entre dos pilares, en una esquina, tú decides. También hay hamacas silla, que puedes colgar en cualquier sitio, hasta dentro de casa. Y si no quieres agujerear paredes, también hay soportes para hamacas.
Los tejidos son de algodón que lo puedes lavar, o si no también hay de fibra sintética, que al tacto es igual que el algodón, y no decolora aunque le toque el sol, y cuando se moja, se seca en un pis pas.
Ya no tienes excusa, para no darte un capricho este verano.
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